El peso chileno enfrenta un panorama incierto mientras el mercado analiza el crecimiento económico del 2,3% interanual registrado en octubre. Este desempeño refleja señales de recuperación, pero también plantea interrogantes sobre su sostenibilidad a mediano plazo.
Uno de los principales motores de este crecimiento ha sido el sector de comercio y servicios, que experimentó un incremento significativo del 6,2%, impulsado por el repunte en las ventas de maquinaria y el dinamismo del comercio minorista, especialmente a través de plataformas en línea. Estos resultados positivos se ven complementados por un aumento en el gasto de los consumidores, lo que podría dar un respaldo adicional al peso chileno. Además, los sólidos datos sobre la producción de cobre publicados el viernes fortalecen el potencial de la moneda, considerando la relevancia del metal rojo en la economía del país.
No obstante, el crecimiento ajustado por estacionalidad de solo un 0,4% en sectores clave, como la producción de bienes y el comercio, genera dudas sobre la sostenibilidad de este repunte del consumo. Esta moderación sugiere que una posible desaceleración podría limitar el margen de apreciación del peso chileno. A esto se suma el entorno económico global, que también genera incertidumbre.
En el ámbito internacional, Donald Trump, líder en las encuestas republicanas para las elecciones de 2024, ha amenazado con imponer aranceles del 100% a los países del bloque BRICS, entre los que se encuentra China, el principal socio comercial de Chile. Esta retórica proteccionista ha fortalecido al dólar estadounidense, aumentando la presión sobre el peso chileno y generando preocupaciones sobre el impacto en las exportaciones de cobre hacia el gigante asiático.
En el corto plazo, el peso chileno podría experimentar volatilidad, especialmente con la publicación de indicadores económicos clave en Estados Unidos esta semana. Estos datos podrían influir significativamente en el sentimiento del mercado, ya que un fortalecimiento adicional del dólar agravaría la presión sobre la moneda chilena.